Es un evento festivo anual que se celebra en el distrito de Gloucester (Inglaterra, Reino Unido) cada último lunes de mayo. Se trata de una carrera donde los competidores deben atrapar un queso Gloucester arrojado desde una colina inclinada, lo que se traduce en caídas por la velocidad que puede llegar a alcanzar.
Aunque en origen se trata de una festividad local de Brockworth, un pequeño pueblo del condado de Gloucestershire, con el paso del tiempo ha ganado fama internacional y hoy cuenta con miles de visitantes.