Dicen que fue el escritor de la memoria y del silencio, el autor del humor más refinado y mordaz que siempre mantuvo los pies en la tierra.
Fue un gran admirador de Chejov. En sus libros encontramos una visión contemporánea, plena de presente, pero también de humor y de paradojas.
Llevó con gracia su sabiduría literaria, haciendo de cada libro una aventura de sutileza irónica y comedia social.
Fue distinguido con el Premio Cervantes en 2005.
Desde aquí les enviamos nuestras buenas vibras a sus familiares y colegas.
"Crear, pensar y vivir con humor".