
Nos llega la siguiente información de la Asociación española de caricaturistas: Concursos internacionales de caricaturas que incumplen sus propias reglas.
Desde la Asociación Española de Caricaturistas AEC, queremos denunciar y hacer público un hecho que está comenzando a proliferar entre el colectivo de artistas de la caricatura, y que no podemos pasar por alto en ningún caso.
Últimamente frecuentan en el panorama de los concursos internacionales de caricatura, ciertos certámenes que incumplen sistemáticamente sus propias reglas y desdoran la reputación de esta disciplina. Faltan al respeto a sus concursantes que con ilusión y esfuerzo participan y dan vuelo y reconocimiento al evento, y en definitiva menguan el prestigio que atesora esta disciplina y sus artistas. Porque el engaño y el fraude no vienen de un cliente o de alguien externo a este mundo. Proviene de un acto creado precisamente para promocionar la caricatura, cosa que aún reviste más gravedad y nos acerca al ridículo como colectivo y eso, eso no lo podemos tolerar.
En esta ocasión ha sido el 3er certamen de caricaturas de Al-Azhar (Egipto) cuyo coordinador general es Abeer Mahmoud Fathi, entre otras personas.
El funcionamiento es el acostumbrado. Creación de unas bases, captación de personas para formar parte del jurado, con la promesa del pago de unos honorarios (como debe ser) e inclusión de premios económicos para los ganadores. Puesto el cebo, es normal que los artistas acudamos a participar y derrochemos esfuerzo. Unos por entregar sus mejores obras y otros por calificar con la mejor equidad posible a los participantes. Y, sobre todo, por promocionar y mantener vivo el interés por la caricatura últimamente tan perjudicada. Lo que ningún participante puede esperar, ni debe esperar es la respuesta de la organización: Impago de los premios, falta de comunicación e información tanto a participantes como al jurado de quienes son los ganadores, del devenir del concurso y del pago de los premios y honorarios.
Resumiendo, si te he visto no me acuerdo. Se cierra el chiringuito y nadie atiende llamadas, correos o mensajes. Esto es muy grave porque sienta precedente y de hecho no es el único concurso que ha utilizado esas “artes” para conseguir sus objetivos a base de tener en sus filas gente reconocida que les generé prestigio, y lo peor, personas trabajando gratis tanto a nivel de concursante como de jurado.
Es un llamamiento el que hacemos desde la AEC a decir basta a estas conductas y si es necesario, a no participar, denunciar o exigir evidencias de que el certamen tiene apoyo y presupuesto. Muy probablemente paguen justos por pecadores, pero todos conocemos cuales son los concursos serios y de prestigio. Quien nunca debe pagar y ser partícipe de estas conductas es el o la artista.
“Os animamos a denunciar esas prácticas, a no callar y si es posible entre todos recabar la información necesaria para crear un listado de posibles concursos “basura” y evitar pérdidas de tiempo, un elemento muy preciado para el caricaturista.”
Para más información:
ASOCIACIÓN ESPAÑOLA DE CARICATURISTAS
E-mail: info@aecaricaturistas.
"Crear, pensar y vivir con humor".