El humor es cosa seria. No. 6

Jorge Abasolo
Escritor, humorista, periodista e historiador.
El humor es cosa seria. No. 6

Article in English

 

Pepe Pelayo: "Con el humor logré mi realización personal"

Este pensador cubano-chileno es además escritor, actor, guionista, investigador del humor, promotor de la lectura, investigador de la teoría humorística, videísta y realizador de collages.

Si hay algo que caracteriza los tiempos que nos ha tocado vivir es que la realidad circundante es cada vez más problemática y compleja. Desde los medios de comunicación no cesan de llegarnos noticias preocupantes, cuando no directamente desgraciadas, relativas a todos los puntos del planeta. En cuanto al cercano e inmediato entorno profesional y personal, el estrés y las preocupaciones de diversa índole son el pan nuestro de cada día.

Sin embargo –y afortunadamente- a los seres humanos nos diferencia de nuestros congéneres del reino vegetal y animal, que tenemos la capacidad de reír. Y en esta característica fundamental tenemos nuestro mejor aliado para enfrentarnos con el difícil panorama que se nos presenta cotidianamente.

Decimos que tienen sentido del humor las personas que cuentan chistes, hacen bromas reconocen el factor disparatado y absurdo en situaciones que para la mayoría de las personas son serias. Pero quien posee este ingenio humorístico no necesariamente disfruta de buen humor. Lo demuestra el hecho de que alguien puede, por ejemplo, ser un cómico excelente y, sin embargo, en su vida personal sentirse decepcionado. Con algo de razón un gran escritor dijo que “todos los humoristas profesionales son tristes”. Exagerado o no, en ello hay trazas de razón.

Distinto es el caso de Pepe Pelayo, a quien admiro por su profesionalismo e ilustración en diversas materias. Desde luego, el humor es su fuerte;y lo trabaja con rigor litúrgico y esmero de espeleólogo. Ya veremos por qué…

Nacido en Matanzas, Cuba (1952) es ingeniero civil de profesión y llegó a Chile hacia el año 1992.

Es humorista literario, escénico, gráfico, musical y audiovisual. Estudioso de la teoría y la aplicación del humor.

Ha obtenido más de treinta premios y distinciones por su obra literaria, gráfica, y escénica en Cuba, Chile, Colombia, Argentina, Ecuador, Brasil, España, Italia, Alemania, Turquía e Irán.

¡Sí, leyó bien, amigo lector…! No estoy exagerando.

Fue fundador, guionista, comediante, director artístico y director general de la reconocida Compañía “La Seña del Humor” en Cuba (1984-1991).

Hace teatro, radio, TV y cine, presentándose en varios países latinoamericanos, además de Estados Unidos y Canadá.

Y no todo termina aquí. También fue Director de Humor del Área de Entretención de Televisión Nacional de Chile.

Le han publicado en Hispanoamérica, 73 libros (47 de humor infantil, 17 para jóvenes y adultos y 9 sobre teoría del humor),

Pepe Pelayo conversa con Abasolo: “El stand up comedy tiene un nivel muy bajo, salvo honrosas excepciones”

Imparte sus “Charlas Chaplin” sobre salud, crecimiento personal, mundo laboral, pedagogía y motivación a la lectura. Todo ello a través del prisma del humor.

Es creador de fotomontajes humorísticos, para lo cual ha participado en diferentes publicaciones de América, Europa y Asia, participando en exposiciones individuales en Chile, Estados Unidos y Portugal, más otras colectivas en numerosos países.

Colabora con sus artículos y cuentos en varias publicaciones nacionales y extranjeras.

Miembro de la Sociedad Internacional de Estudios del Humor y de La Red de Investigaciones y Estudios del Humor en Chile (RIEH). Como si ello no bastare, es fundador y editor del sitio web: www.humorsapiens.com

Más información en www.pepepelayo.com

El humor es equilibrio

La palabra humor procede del griego humus y era empleada por los griegos para referirse a los “humores” o fluidos que llenan el cuerpo humano y nos mantienen vivos. Conforme a los antiguos tratados de medicina, la salud o eucrasia procede del equilibrio entre dichos fluidos. Así pues, el concepto de buen humor está ligado al de equilibrio.

Nuestro estado de ánimo puede ser muy variable, desde el extremo inferior, hasta el extremo superior. Ambos polos son indeseables, ya que el inferior o bajo implica sentimientos dolorosos tales como la irritabilidad o la tristeza, mientras que el extremo superior o alto nos sumiría en un excesivo optimismo, carente de autocrítica y contacto con la realidad.

El buen humor nos mantiene dentro de la zona de ánimo moderadamente positiva. Es en esta franja equilibrada y centrada entre ambos extremos donde nos encontramos más predispuestos a una relación adecuada con la realidad.

Menos prolegómenos y aprovechemos el tiempo para conversar con este gigante del humor hispanoamericano.

-¿En qué momento te decides a ser un profesional del humor? Te lo pregunto porque ese “tránsito” de ser aficionado a profesional no es una decisión fácil…

-Me gradué de Ingeniero Civil en 1979. Trabajando como tal, en 1982 gano un concurso literario en mi ciudad natal (Matanzas, Cuba) con cuentos humorísticos. En 1983 junto con tres amigos creamos una página de humor literario y gráfico en el suplemento cultural del diario de la ciudad. En 1984 fundamos el grupo escénico “La Seña del Humor”, de estilo parecido a Les Luthiers. Hasta ahí, todo fue como aficionado. En 1987 fue tanto el éxito del grupo a nivel nacional que nos profesionalizamos y colgué el título. Al inicio ganaba menos que como ingeniero, pero valió la pena. Un año después ya duplicaba el sueldo y multiplicaba por mil el placer de mi realización personal.

-¿El cubano tiene fama de ser un tipo alegre. ¿Cómo manifiesta en la actualidad su disidencia?

-Hay tres teorías. Una, conozco pensadores que dicen que los cubanos no somos alegres, al contrario. Aseguran que esa alegría es una fachada para ocultar nuestra tristeza. Dos, hay quien afirma que los cubanos se nos ve alegres, porque somos muy superficiales y pan y circo es lo único que necesitamos.

Tres, están los que aseguran que la alegría es un rasgo de la cubanía.

En mi opinión, sin haber estudiado el punto, me atrevería a decir que somos extrovertidos, por el clima. Somos musicales por la mezcla sanguínea mestiza de español con africano.

Como señaló un gran ensayista cubano, Jorge Mañach (1898-1961), el nuestro es un pueblo joven, inmaduro aún. Yo eso lo extiendo a toda Latinoamérica. Y al igual que en todo nuestro continente, la alegría, el reírse de las dificultades, el buscar pretextos para la festividad (alcohol, baile, burla, etc.), el ser bonachón, el no complicarse y otras características, nos define.

Aunque no dudo que de verdad sea un escudo para esconder ciertos grados de pesimismo, de tristeza. Quién sabe…

Lo que sí te afirmo, que el humor es otra cosa, ya sea en Cuba o en cualquier país de esta América Latina. Abunda la burla, lo ridículo, pero el buen humor, no. Ese humor solo lo vemos en contadas ocasiones en nuestros creadores. No confundir el estado de ánimo -la alegría, por ejemplo-, con el ejercicio del sentido del humor.

Entonces, ser disidente o no, no cambiará nada de lo aquí expuesto…pienso yo.

Pepe Pelayo lleva más de cuarenta años dedicados al humor

-¿Qué fue lo primero que te llamó la atención del humor chileno?

-Esto que te confesaré no significa que lo enjuicie como malo o bueno. Solo diré características que me encontré en 1992 cuando me vine a vivir a este país definitivamente.

El fuerte del humor estaba en la televisión. Incluso me sorprendió que se le dijera humorista nada más al que contara chistes o hiciera monólogos, en circunstancias que humorista es todo aquel que hace humor, sin importar la manifestación artística en que lo haga.

Vi magníficos comediantes y tuve el honor de trabajar con muchos, pero poquísimos buenos espacios de humor. Pocos guionistas y muy escasos humoristas literarios.

En el teatro imperaba el humor vulgar, o solo dedicado al chiste verde, sexual. Pocas comedias costumbristas.

Coco Legrand me encantó, así como Fernando Alarcón, Pato Torres, Rodolfo Bravo, Rebeca Guigliotto, Gloria Münchmeyer, Álvaro Salas, Firulete, Julio Jung, Andrés Rillón y los inicios de Felo, por mencionar algunas figuras del escenario y la TV.

En humor gráfico me asombró la calidad de Hervi, Palomo, algunos de los de Topaze y Condorito, que me gustó hasta que se dedicó a ilustrar chistes populares.

El humor político era más fuerte que el resto, con el peligro de siempre: que caduca rápidamente.

Por último, he vivido el auge del stand up comedy y, lamentablemente, el nivel es muy bajo. Solo se salvan contados comediantes. Te reitero, Jorge…hablo según mi gusto, que no significa que sea necesariamente la verdad.

Y como expresé antes, el humor popular del chileno era (y es) bastante parecido a los demás países latinoamericanos; es decir, campea la picardía, la necesidad de usarlo para enfrentar dificultades y el costumbrismo que debe existir en cualquier cultura.

Pepe Pelayo: “Pienso que tenemos derecho a reírnos de todo”

-¿Percibes que en Chile hay temas que no se pueden abordar? En ese aspecto el humor chileno difiere en mucho del humor francés, que se ríe de todo: de la religión, del aborto, etcétera…

-He sido testigo de censuras o intentos de censura en algunos temas como el religioso, como mencionaste, pero también el político. Sin embargo, insisto, no creo que sea privativo de Chile. Eso sucede en otras partes del mundo. ¡Y qué decirte de la censura a lo políticamente correcto! Yo tengo un cuento donde un bufón es censurado por el Rey al ser presionado este por los militares, por los religiosos, por los comerciantes, por las damas de la Corte, por los campesinos, por los pajes, y hasta por los borrachos, los brujos, los ladrones, etcétera…hasta que el bufón tuvo que terminar dedicándose solo a hacer cosquillas.

Con esto te digo que soy de la opinión de que tenemos derecho a reírnos de todo. Si no te gusta mi chiste, no lo consumas y si te ofende, demándame, pero prohibir chistes, obras cómicas o humoristas, es vivir en una dictadura. Lo que pasa es que si un humorista hace un humor agresivo, ofensivo, humillante, muy ácido, se expone a que dejen de seguirlo, dejen de contratarlo y hasta lo multen o apresen si los jueces deciden en su contra en una demanda. La libertad de expresión está por encima de todo, eso está claro. Pero si el humorista le hace daño a alguien, tiene que pagar ese costo. Ese es el único límite en el humor.

En Chile no hay mucha consciencia de eso. Veo humoristas, escénicos sobre todo, que dicen barbaridades (vulgaridades, obscenidades) y ofenden, humillan y nadie les dice nada. Sin contar que esos humoristas están deformándole el gusto a la gente, y más a los niños.

 

 

Pepe Pelayo: "With humor I achieved my personal fulfillmen"

 

His Cuban-Chilean thinker is also a writer, actor, screenwriter, humor researcher, promoter of reading, humor theory researcher, video artist and collage maker.

If there is something that characterizes the times in which we have had to live, it is that the surrounding reality is increasingly problematic and complex. Worrying news, if not directly unfortunate, related to all parts of the planet, does not cease to reach us from the media. As for the close and immediate professional and personal environment, stress and concerns of various kinds are our daily bread.

However -and fortunately- human beings are different from our peers in the plant and animal kingdom, who have the ability to laugh. And in this fundamental characteristic we have our best ally to face the difficult panorama that is presented to us on a daily basis.

We say that people who tell jokes, make jokes, recognize the absurd and absurd factor in situations that for most people are serious. But whoever possesses this humorous wit does not necessarily enjoy a good mood. This is demonstrated by the fact that someone can, for example, be an excellent comedian and yet, in his personal life, feel disappointed. With some reason a great writer said that "all professional humorists are sad." Exaggerated or not, there are traces of reason in it.

The case of Pepe Pelayo is different, whom I admire for his professionalism and enlightenment in various subjects. Of course, humor is his forte, and he works it with liturgical rigor and speleologist's care. We'll see why...

Born in Matanzas, Cuba (1952) he is a civil engineer by profession and arrived in Chile around 1992.

He is a literary, scenic, graphic, musical and audiovisual humorist. Scholar of the theory and application of humor.

He has obtained more than thirty awards and distinctions for his literary, graphic, and scenic work in Cuba, Chile, Colombia, Argentina, Ecuador, Brazil, Spain, Italy, Germany, Turkey, and Iran.

Yes, you read that right, reader friend…! I am not exaggerating.

He was founder, screenwriter, comedian, artistic director and general director of the renowned Company "La Seña del Humor" in Cuba (1984-1991).

He does theater, radio, TV and cinema, appearing in several Latin American countries, as well as the United States and Canada.

And not everything ends here. He was also Director of Humor for the Entertainment Area of ​​Televisión Nacional de Chile.

They have published 73 books in Latin America (47 children's humor, 17 for young people and adults and 9 on humor theory),

He gives his "Chaplin Talks" on health, personal growth, the world of work, pedagogy and motivation to read. All this through the prism of humor.

He is the creator of humorous photomontages, for which he has participated in different publications in America, Europe and Asia, participating in individual exhibitions in Chile, the United States and Portugal, plus other collective ones in numerous countries.

He collaborates with his articles and stories in several national and foreign publications.

Member of the International Society for Humor Studies and of the Chilean Humor Research and Studies Network (RIEH). As if that were not enough, he is the founder and editor of the website: www.humorsapiens.com

More information at www.pepepelayo.com

Humor is balance

The word humor comes from the Greek humus and was used by the Greeks to refer to the "humors" or fluids that fill the human body and keep us alive. According to ancient medical treatises, health or eucrasia comes from the balance between these fluids. Thus, the concept of good humor is linked to that of balance.

Our moods can be highly variable, from the low end to the high end. Both poles are undesirable, since the lower or low end implies painful feelings such as irritability or sadness, while the upper or high end would plunge us into excessive optimism, lacking self-criticism and contact with reality.

A good mood keeps us within the moderately positive mood zone. It is in this balanced and centered strip between both extremes where we find ourselves most predisposed to an adequate relationship with reality.

Less prolegomena and let's take advantage of the time to talk with this giant of Hispanic American humor.

-When did you decide to be a humor professional? I ask you because this "transition" from being an amateur to a professional is not an easy decision...

-I graduated as a Civil Engineer in 1979. Working as such, in 1982 I won a literary contest in my hometown (Matanzas, Cuba) with humorous stories. In 1983, together with three friends, we created a page of literary and graphic humor in the cultural supplement of the city's newspaper. In 1984 we founded the stage group "La Seña del Humor", similar in style to Les Luthiers. Until then, everything was as an amateur. In 1987 the group was so successful at the national level that we became professional and I hung up the title. At the beginning I earned less than as an engineer, but it was worth it. A year later, my salary was already doubled and the pleasure of my personal fulfillment was multiplied by a thousand times.

-Does a Cuban have a reputation for being a cheerful guy? How do you currently express your dissidence?

-There are three theories. One, I know thinkers who say that Cubans are not happy, on the contrary. They claim that joy is a facade to hide our sadness. Two, there are those who affirm that we Cubans seem happy, because we are very superficial and bread and circuses is the only thing we need.

Three, there are those who assure that joy is a trait of the Cuban identity.

In my opinion, without having studied the point, I would dare to say that we are extroverts, because of the climate. We are musical because of the mestizo blood mixture of Spanish with African.

As a great Cuban essayist, Jorge Mañach (1898-1961) pointed out, ours is a young people, still immature. I extend that to all of Latin America. And as in our entire continent, joy, laughing at difficulties, looking for pretexts for the festivity (alcohol, dance, mockery, etc.), being good-natured, not getting complicated and other characteristics, define us.

Although I do not doubt that it really is a shield to hide certain degrees of pessimism, of sadness. Who knows…

What I do affirm to you is that humor is something else, be it in Cuba or in any country in Latin America. Mocking abounds, the ridiculous, but good humor, no. We only see that humor on a few occasions in our creators. Do not confuse the state of mind -joy, for example-, with the exercise of the sense of humor.

So, being a dissident or not will not change anything of what is stated here... I think.

Pepe Pelayo has spent more than forty years dedicated to humor

-What was the first thing that caught your attention about Chilean humor?

-What I will confess to you does not mean that I judge him as bad or good. I will only say characteristics that I found in 1992 when I came to live in this country for good.

The forte of humor was on television. I was even surprised that a humorist was called nothing more than someone who told jokes or did monologues, in circumstances that a humorist is anyone who makes humor, regardless of the artistic manifestation in which it is done.

I saw magnificent comedians and had the honor of working with many, but very few, good comedy spaces. Few scriptwriters and very few literary humorists.

In the theater, vulgar humor prevailed, or only dedicated to dirty, sexual jokes. Few costumbrist comedies.

I loved Coco Legrand, as well as Fernando Alarcón, Pato Torres, Rodolfo Bravo, Rebeca Guigliotto, Gloria Münchmeyer, Álvaro Salas, Firulete, Julio Jung, Andrés Rillón and the beginnings of Felo, to mention a few stage and TV figures.

In graphic humor, I was amazed by the quality of Hervi, Palomo, some of those from Topaze and Condorito, which I liked until he dedicated himself to illustrating popular jokes.

The political humor was stronger than the rest, with the usual danger: that it expires quickly.

Finally, I have lived through the rise of stand up comedy and, unfortunately, the level is very low. Only a few comedians are saved. I reiterate, Jorge... I speak according to my taste, which does not mean that it is necessarily the truth.

And as I expressed before, the Chilean popular humor was (and is) quite similar to that of other Latin American countries; that is to say, mischief, the need to use it to face difficulties and the customs that must exist in any culture.

Pepe Pelayo: "I think we have the right to laugh at everything"

- Do you perceive that in Chile there are issues that cannot be addressed? In this aspect, Chilean humor differs greatly from French humor, which laughs at everything: religion, abortion, etc....

-I have witnessed censorship or attempts at censorship on some topics such as religion, as you mentioned, but also politics. However, I insist, I do not think it is exclusive to Chile. That happens in other parts of the world. And what to tell you about censorship of political correctness! I have a story where a jester is censured by the King when he is pressured by the military, by the religious, by the merchants, by the ladies of the Court, by the peasants, by the pages, and even by the drunkards, the wizards, thieves, etc.... until the jester had to end up dedicating himself only to tickling.

With this I tell you that I am of the opinion that we have the right to laugh at everything. If you don't like my joke, don't consume it and if it offends you, sue me, but banning jokes, comic or humorous works, is living in a dictatorship. What happens is that if a comedian makes aggressive, offensive, humiliating, or very acid humor, he is exposed to being unfollowed, stopped hiring, and even fined or imprisoned if the judges decide against him in a lawsuit. Freedom of expression is above all, that is clear. But if the comedian hurts someone, he has to pay that cost. That is the only limit in humor.

In Chile there is not much awareness of that. I see comedians, stage artists above all, who say atrocities (vulgarities, obscenities) and offend, humiliate and nobody says anything to them. Not to mention that these comedians are distorting people's taste, especially children.

 

 

 

Copyright © Jorge Abasolo. Publicado en Humor Sapiens con el permiso de su autor. Reservados todos los derechos.