
Se dice que un recién nacido tarda alrededor de 6-8 semanas en esbozar su primera sonrisa como respuesta social o emocional. Éstas se suelen asociar a la voz de su madre o al visualizar una cara que le resulta familiar.
Durante las semanas previas, los que más ríen son los padres, tratando que el bebé logre imitarles.
Durante gran parte de la infancia, la risa es un término común ante cualquier situación. Se estima que, a los 4 años, un niño ríe una media de 300 veces al día. La amplia imaginación, interacción social o el humor repetitivo son las principales razones de ello.
Todo empieza a cambiar una vez entramos a la veintena de la vida. A partir de los 23 años, la persona promedio tiende a caer en el llamado 'Humor Cliff'. Un fenómeno que indica la 'reducción' de la risa, tendiendo a reír y sonreír cada vez de forma menos común, según indica 'Gallup' con una encuesta alrededor de más de 160 países.
Con el paso de los años, la brecha cada vez es mayor y se calcula que una persona promedio de 40 años de edad ríe tan solo 4 veces al día. Esto es una reducción de hasta 296 veces en la media respecto a la niñez de una persona. (Fuente: mundodeportivo.com).
"Crear, pensar y vivir con humor".