Humores del mundo - Mundo de los Humores - Colombia (Raúl Zuleta/Nani Mosquera)

Osvaldo Macedo de Sousa
Historiador, escritor, curador, promotor y especialista en humor gráfico.
Mundo de los Humores - Colombia (Raúl Zuleta/Nani Mosquera)

¿Se puede medir el estado de ánimo de un país por su FIB, el número de humoristas profesionales o el número de participantes en Festivales Internacionales de Humor? Si se utiliza este último índice, Colombia se encuentra entre los primeros. «En Colombia - garantiza la dibujante Melissa Baena Puerta - hay pocos cómicos reconocidos, pero hay estudios, como el del Happy Planet Index, que muestran que“ en el mundo hay 149 nacionalidades más felices que Estados Unidos y solo una más feliz que el colombiano: Vanautu”. ¡Es porque tenemos buen humor, nos reímos de todo!».

Dicen que el colombiano es "cursi" por ADN, un pequeño pícaro con una larga tradición de la anécdota costumbrista sobre el "negro", "costeño", "pastusos", generalmente "verde", es decir, en forma cómica ramplon (vulgar). Siempre hay un dicho para cualquier situación en la punta de la lengua, una forma de interactuar que condimenta las relaciones cotidianas. Comenta el humorista Diego Camargo: «Donde hay humor, no hay lugar para el fanatismo. Pero tenemos un mártir del humor: Jaime Garzón» (un humorista asesinado por orden de los jefes de las Fuerzas de Seguridad Nacional). Continúa Camargo: “Nuestra risa es una broma (casi siempre de los más pobres que nosotros), pero a la vez empática, porque todos somos pobres. Nos encanta hacer caricaturas absurdas de tipos sociales, riendo a través de la visión de los oprimidos». Su literatura es un buen ejemplo de ello con García Márquez, Cepeda Samudio, David Betancourt, Andrés Ospina. Así como el más grande caricaturista de la caricatura, Carlos Villegas.

¿Y el humor gráfico, tan relevante con nombres como Consuelo Lagos, Elena Ospina, Nani Mosquera, Omar Turcios, Camilo Triana, Fernando Pica, Guaico, Jucalo, León, Ramiro Zapatra, Mel, Raúl Zuleta…? Raúl Zuleta da su perspectiva: «El humor gráfico en Colombia existe en dos contextos: el de los periódicos y revistas y el de las caricaturas que hacemos fuera de ese contexto. En el primero, aunque hay periódicos y revistas donde se publica, la mayoría son de un nivel pésimo, no solo por la sencillez de las ideas que desarrollan, sino también por una estética poco interesante. La caricatura en Colombia dejó de generar opinión pública y se convirtió solo en presencia de un espacio gráfico que por tradición tienen todas las revistas. Por tanto, es una caricatura que realmente no cumple su función con respecto a la sociedad, ya que no puede aportar nada al contexto de la reflexión ante los hechos noticiosos. Por otro lado, hay todo un grupo de artistas que actualmente no publican en nuestra prensa, salvo excepciones, destacan en participar en concursos internacionales y su nivel es tan bueno que son premiados en todo el mundo».

 ¿Qué es el humor para ti y para qué sirve? «Hacer reír a la gente es un acto muy complejo. Debería hacerte reír y pensar. La mayoría de los artistas que crean situaciones divertidas lo hacen con cosas triviales que tras la risa dejan un vacío. El buen humor es más atemporal, más complejo, la intervención dura más y renace cada vez que se ve como un acto reflexivo, contribuyendo a la construcción del pensamiento crítico en el espectador».

Otra gran artista colombiana que se destaca a nivel internacional, especialmente en el área del humor femenino, ha sido Nani Mosquera, quien acaba de ser consagrada con el Premio Catrina 2021 en la Feria del Libro de Guadalajara - México.

Hay humor femenino y humor en el femenino, al igual que hay muchas otras formas de humor, porque cada uno tiene su propia forma de ver la vida, dependiendo de su cultura, edad, religión, tendencias sexuales. Todos tenemos humor, todos somos diferentes e iguales. 

En el campo del caricaturismo, como en muchos otros campos profesionales, no ha sido fácil para las mujeres imponerse, no por falta de humor y calidad estética, sino por las barreras que los "varones" todavía intentan levantar hoy.  Una de las barreras es la imagen que las obliga a ser dulces, sumisas, subservientes, cariñosas, hadas hogareñas, características que en principio son antagónicas al humor, la sátira política y social. Sin embargo, también son madres (a pesar de la estúpida educación actual de que los padres no deben castigar a sus hijos quando tienen mal comportamiento) y como tales saben ser educadoras, saben llamar la atención con cariño satírico.

Lo que más temen los hombres, además de poder ceder su lugar porque se sienten inferiores, es el humor femenino, porque la visión de la mujer es mucho más analítica e intuitiva, profundizando en los temas. Es esta forma menos superficial de esta comicidad la que ha hecho que las artistas más persistentes hayan logrado imponerse y conquistar su espacio en la prensa.

Comparativamente, todavía no hay muchas artistas de humor gráfico trabajando, campo en el que se destacan los artistas colombianos, pero si cubrimos internet más allá de la prensa, entonces es Irán el que se convierte en un país donde hay más mujeres haciendo humor de calidad, para participar en festivales internacionales. A modo de referencia, la Bienal de Penela (que doy el Director) suele contar con la participación de dos a tres docenas de artistas.

En Portugal, las primeras caricaturistas femeninas empezaron a aparecer con la Primera República (1910) y si alguna que otra aparece de vez en cuando, como ocurre en esta época con Cristina Sampaio, nunca hubo un número significativo.

Para escuchar la opinión de una mujer que luchó y lucha constantemente por su lugar en el universo del humor, cedo la palabra a la colombiana Nani Mosquera, cuya «antiheroína» es «Magola»: «No hay profesiones solo para hombres o solo para mujeres, como en la medicina que comenzó a ser ejercida por hombres y, poco a poco, las mujeres fueron colonizando este campo, hasta que se convirtió en algo habitual. Lo mismo ocurrirá con el caricaturismo, donde poco a poco se irán integrando más mujeres. Creo que el mundo tiende a ser más tolerante, sin embargo, de vez en cuando, alguien ve mi trabajo y todavía me pregunta: ¿Hiciste esto? ¿Y quién escribe los textos por ti? ¿Hay alguien que te diga lo que vas a hacer? Les cuesta creer que me dedique seriamente a esta profesión.

Creo que las mujeres en realidad tienen un punto de vista diferente sobre cualquier tema. Por ejemplo, estamos acostumbrados a ver mujeres con grandes pechos y enormes caderas y el protagonista es el hombre. Prefiero hacer lo contrario, mujeres más normales y situaciones que un hombre no podrá contar porque no sabe. También utilizo una estética diferente.

No es el objeto mujer al que estamos acostumbrados, dibujo mujeres normales, con pelos en las piernas (todos lo tenemos), con problemas cotidianos, con ropa cómoda. No es una mujer que existe para satisfacer a un hombre, ella existe para satisfacerse a sí misma. Magola es un nombre muy común en Colombia, y eso es lo que quería dibujar, gente común.

Me inspiró mucho mi madre, una ama de casa autosuficiente que tiene que luchar. Sus características físicas son una protesta contra los estándares de belleza que tenemos en el país porque no tiene la nariz hacia arriba, no tiene cirugía, no tiene trasero, no tiene curvas en las caderas, no. Se afeita las piernas, usa zapatos cómodos y nunca usa tacones. Es una mujer que piensa y tiene una opinión, no una mujer que espera que un hombre la salve. Es una crítica a la sociedad, con un mensaje directo contra los hombres, como mi padre, porque quería deshacerme de toda esa carga profunda que tenía con la ira, la decepción por todo lo vivido, y resultó en un gran material para trabajar.

Al principio usé mucho sarcasmo, todo el enojo que tenía contra los hombres, mucha lucha por la liberación de la mujer, pero aprendí a moderarme un poco, a trabajar por la igualdad de género, a perdonar en el camino porque tengo una experiencia fantástica. esposo que me enseñó que no todos los hombres son como mi padre. También hay buenos hombres, parejas que trabajan y se llevan bien, padres que son feministas y cariñosos.

Todo esto se reflejó en la tira cómica. Es una mujer moderna, que cree en una vida equilibrada en pareja, que no odia a los hombres, que sabe que las mujeres también se equivocan y que quiere ser valorada, no por su exterior, sino por lo que piensa, por lo que quiere. es. Sigue siendo un ojo crítico que intenta desenmascarar una sociedad sexista, en la que el poder y la corrupción suelen ir de la mano y la gente común tiene que surfear un día a día en el que los problemas personales se suman a lo público. La familia es la célula de la sociedad, su base, y si la familia está enferma, la sociedad también. Las mujeres jugamos un papel importante y, lamentablemente, a veces somos los primeros machistas.

Magola no es infalible, también se equivoca, el marido también tiene razón, muy pocas veces, pero también tiene razón [risas]. Me di cuenta de que estos temas no son solo problemas relacionales en Colombia o España, sino universales, y que las parejas se relacionan por igual, sin importar el idioma o la cultura, todos tenemos los mismos problemas, por eso intento ser cada vez más universalista con Magola».

 

Raúl Zuleta

Raúl Zuleta

 

Raúl Zuleta

 

Nani Mosquera

Nani Mosquera

 

Nani Mosquera

 

Nani Mosquera

 

Nani Mosquera

Nani Mosquera

 

 

Nani Mosquera

 

Nani Mosquera

 

Nani Mosquera

 

Nani Mosquera

Copyright © Osvaldo Maceda de Sousa. Publicado en Humor Sapiens con el permiso de su autor. Reservados todos los derechos.